jueves, 25 de junio de 2009

JOAQUÍN SOROLLA

Me ha gustado mucho ver a Sorolla en El Prado. Una amplia e interesante exposición que no hay que dejar de ver, pero para mí el verdadero placer es ver a Sorolla en su Casa Museo, casi en silencio, con poca gente, un domingo por la mañana cualquiera; así me gusta verle, atrapar la luz de sus lienzos, cegarme con el color azul, saborear el Mediterráneo e impregnarme de la atmósfera familiar que emana todo el museo. Fue un pintor prolífico pero estoy segura que le faltó tiempo,"No hay nada inmóvil en lo que nos rodea. Hay que pintar deprisa, porque ¡cuánto se pierde, fugaz, que no vuelve a encontrarse!". Sus cuadros hay que mirarlos despacio, retener la mirada en cada pincelada y flipar con su belleza.

object width="425" height="344">

domingo, 21 de junio de 2009

miércoles, 17 de junio de 2009

essere sinceri in questo mondo sembra un difetto, forse abbiamo bisogno di illudirsi a un sonrriso bello ma vuoto e dimostriamo la nostra debbolezza nell accetare di fingere e diventare come loro, una rosa di plastica.

ahora un video divertente : una portuguesa, un turco y tres españolas profanando la sacra pompei bajo el calor napolitano del mes de junio. Ojo al dato!!!


sábado, 13 de junio de 2009

¡FELICIDADES!



¡FELICIDADES, SARA!

Soy un gato feliz. ¡Ah, recuerdo cuando vine a esta casa!. Me gustó, me gustó mucho, pero sobre todo me gustó cuando llegó Sara, la más "cuerda" de los que habitan en ella. Me llama gato y me trata como lo que soy, ¡un gato!. No como la mamma que me llama "Niño". ¡Niñooooo!, me grita y a mi me da de todo, ¿mira que llamarme niño...?. ¿Qué van a pensar los gatunos del barrio?. Menos mal que Sara la llama al orden y le dice: "¡mamá, recuerda...es un gato!". Me gusta todo de Sara, como me acaricia, como se ríe, como me mira..., hasta su cuarto, ese ¡follón! lleno de libros y dibujitos; también me gusta tumbarme cerca de ella, escuchar su música en francés y verla dibujar. Lo más divertido es cuando llega la hora de irse a la cama, Sara se acuesta y llega la mamma a darle besitos, subo corriendo y me tumbo al lado de las dos, siempre igual, el mismo monólogo de la mamma, bla-bla-bla-bla, empiezo a dormitar con el rum-rum de su voz...hasta que Sara levanta la cabeza y le dice: "mamá, ¿ no te cansas de hablar?", entonces salgo de mi sopor y ...¡ todos a dormir!, me tumbo en mi cama, cierro los ojos y digo: "¡¡hasta mañana Sara y que cumplas muchos más!!".