jueves, 5 de febrero de 2009

Revolutionary Road

El otro día conocí los estupendos Cine Cité Manoteras, vimos en v.o. Revolutionary Road y os puedo decir que fue una verdadera gozada ver en esa pantalla a dos geniales actores como Leonardo DiCaprio y Kate Winslet. Ver con tanta nitidez sus expresiones, su limpia belleza, fue como estar en la tercera fila del Royal Court, era puro teatro.
Basada en la novela de Richard Yates, la peli está escenificada en los años 50 aunque se puede trasladar a cualquier época. Habla de sentimientos, de frustraciones, de decepciones, de la vida en pareja.
El director Sam Mendes ya nos mostró en su premiada American Beauty el lado oscuro de la familia americana de clase media, la aparente perfección de su imperfecta vida. Sigue la misma línea en Revolutionary Road donde nos enseña el drama que puede esconder una preciosa casa en un barrio residencial. Una pareja que se cree especial, diferente del resto, pero que al final es igual que todos. Su ilusión y última esperanza por cambiar de vida huyendo a una gran ciudad para salvar su insatisfecha existencia y así cumplir sus sueños, esos sueños que quedaron aparcados, tal vez cuando llegaron los hijos, no parece posible... Al final vence el conformismo, el repetido "es mejor lo malo conocido que lo bueno por conocer" .
Mantener la tensión durante sus íntegros 119 minutos solo lo consiguen las buenas pelis. Yo, quedé pegada al asiento conmovida pero sin lágrimas.
Termino con una máxima que no sé quien dijo: "carácter es destino"
Imagen de Revolutionary road

1 comentario:

Beatriz Granado dijo...

Me ha encantado esa figura literaria que incluyes: "la aparente perfección de su imperfecta vida"